martes, 25 de marzo de 2008
Próximo entrenamiento
lunes, 24 de marzo de 2008
Final de liga
He aquí el resultado final de la temporada. El único apelativo que me sugiere esta clasificación es el de injusta y que no refleja la realidad vivida en los terrenos de juego. Hemos sido rival para todos los equipos de la división, todos los rivale que tenemos delante han sufrido y mucho para conseguir puntuar contra nosotros, ninguno podrá decir que fue un camino de rosas ya que esta tabla que vemos aquí no son más que números y datos concluyentes pero la verdad está en nuestra cabeza, ni nosotros merecemos termianar sextos ni esclavas con seis empates quedar tercero. Los rivales más fuertes según esta clasificación ganaron en nuestro feudo in extremis y dando gracias. Font de la Figuera creyó habernos ganado y terminaron, en su casa, pidiendo la hora. Esclavas es injusto merecedor de todo lo obtenido, puesto que en ninguno de los dos partidos fue claro merecedor de esa tercera plaza que muy bien sabemos todos que debería ser en todo caso, nuestra.
De todas formas me engañaría a mi mismo si no pensase que los hechos son los que están y los que dan los resultados, pero que realmente la única verdad es la existencia de las personas. Hay que alavar el grupo humano que compone el equipo, que lo ha dado todo en cada partido y se ha dejado la piel en el campo hasta el último minuto y no pude caber ninguna duda de que hemos dado el máximo de nuestras posibilidades.
Del primero al último, desde Pepe, nuestro utillero, hasta Ivan, el portero del cadete que tan dignamente defendió la camiseta en los dos partidos que fue necesaria su presencia.
Esto sólo acaba de empezar, como siempre he dicho debemos mirar el lado bueno de las cosas, hay que ver el aspecto positivo. Hemos quedado sextos según esa clasificación publicada por federación pero para mi sois los primeros, pero eso no los saben en la copa.
Ahora toca darlo todo y demostrar que los números al fin y al cabo son eso, números, pero las sensaciones humanas son únicas e intransferibles. Se puede ganar, se puede perder, pero la sensación de haber hecho las cosas bien... no te la quita nadie.
Honor señores, honor.
A todos gracias.
Último partido de la temporada
De las mejores noticias que se pudieron obtener el viernes fue la reincorporación al equipo de Xuliá que volvía al grupo después de un tiempo en retirada espiritual.
Era un partido complicado, similar al encuentro frente a Ollería, Picassent es un equipo que juega de tres, con un pivot de espaldas a portería y con mucho peligro del que llega desde atrás, rápido y letal cuando encara.
Lo único que debíamos hacer era buscar en nuestros archivos el documento de Ollería y extraerlo para realizar el mismo papel, defensa sólida y máxima concentración. Evidentemente el partido no era el mismo pero había que exigirse al máximo.
Al comienzo del partido las acometidas del rival fueron constantes, se sucedian las ocasiones una y otra vez, y no había reacción alguna por parte de los componentes del equipo. Nos limitábamos a detener el avance del rival pero sin criterio alguno y muchas veces sin efecto.
De esta manera no iba a tardar en llegar un gol de Picassent y, evidentemente no llegó uno, sino dos. En el pequeño margen de 5 minutos de tiempo el conjunto visitante se colocó con dicha ventaja y ni siquiera nos dio tiempo a reaccionar.
Pero ese golpe nos hizo abrir los ojos y poco después, Ferran desde el corner colocaba un balón en el área complicadísimo que Zapata de manera acrobática voleaba y lo situaba en el fondo de las mallas.
El gol, hacía que Picassent bajase a la tierra de nuevo y reconociese que no tenía nada ganado, de hecho desde ese momento el equipo local dirigido por Alex, conseguía mantener el resultado haciendo un buen papel en defensa y llegar al descanso con vida.
La segunda mitad comenzaba con máxima concentración y tras varios avisos, pero sin olvidar el continuo asedio del rival a nuestra portería, conseguíamos empatar el partido por medio de Zapata.
El partido en ese momento se convirtió en un correcalles y las ocasiones iban de una meta a otra. La verdad sea dicha, ellos creaban mucho más peligro que nosotros pero a la par, peligro. Peligro que no tardaron en materializar marcando en un despiste defensivo el 2-3 y de nuevo situarse delante de nosotros y con la moral por las nubes y acrecentando sus ganas de llevarse los tres puntos a la localidad de Picassent.
Con la misma partitura que antes del gol, el Picassent llevaba el verdadero peligro, pero sin embargo a falta de pocos minutos para finalizar el encuentro Alfredo en una contra, de chut cruzado batía al portero y ponía en tablas el encuentro, un punto que podía saber a gloria después de lo visto durante el encuentro. Pero el fútbol y como no el fútbol-sala es injusto en muchas ocasiones y lo que en la jornada anterior nos arrebataron en ocho minutos, ahora no nos lo iba a regalar nadie.
La falta de concentración, esa concentración que en ocasiones nos sitúan entre los mejores equipos de la competición y por contra en otras ocasiones nos hace sufrir en exceso, fue el causante de un nuevo gol de Picassent, que marcaba a pocos minutos del final y nos dejaba sin opciones, ya no de ganar, tampoco nos dio opciones al empate.
De nuevo esa lástima latente en una gran mayoria de partidos del campeonato.